¡Di adiós definitivamente a las piernas cansadas!
Si bien se asocia más al verano, padecer de piernas cansadas también puede darse en invierno debido a que bebemos menos líquido, pasamos más tiempo en interiores sin movernos y el ejercicio físico se reduce, entre otros factores. Así, comenzamos a notar pesadez de las piernas, hinchazón, calambres e incluso dolor. Por ello, hoy os traemos diez consejos para acabar con las piernas cansadas. ¡Toma nota!
En primer lugar, debes incluir en tu dieta una mayor cantidad de frutas y verduras, sobre todo, aquellas con efecto diurético. Entre las frutas, la piña es la más efectiva y en cuanto a las verduras puedes optar por el puerro, la alcachofa, los espárragos o la cebolla. Asimismo, debes procurar beber unos dos litros de líquidos al día -zumos, infusiones, tés, etcétera-.
Asimismo, debes olvidarte de la sal ya que causa retención de líquidos e hinchazón en las piernas. Presta atención a los productos procesados ya que la mayoría contienen sal como conservante. Esto quiere decir que es posible que estés ingiriendo una gran cantidad de sal, así que ¡reduce al máximo la toma de estos productos!
Por tópico que parezca, uno de los consejos para acabar con las piernas cansadas es realizar ejercicio físico de forma habitual. Además, si en tu trabajo permaneces muchas horas sentada, debes levantarte y estirar las piernas cada cierto tiempo, y si estás de pie un largo período, puedes optar por caminar un poco y llevar zapatos con un poco de tacón.
Para favorecer el riego sanguíneo en las piernas también puedes utilizar un reposapiés, que mantendrá tus piernas elevadas, o tumbarte y ponerlas en alto al llegar a casa. Estos son dos simples trucos que combaten el malestar y la hinchazón en la zona.
También debes saber que el agua muy caliente es el aliado perfecto de las piernas cansadas por lo que debes evitarla a toda costa. Para estimular la circulación, alterna en la ducha agua templada y caliente y termina con agua fría en las piernas. ¡Verás qué alivio!
Así, puedes complementar estos cuidados con un suave masaje aplicando cremas efecto frío en movimientos circulares ascendentes. Estos geles tienen unos activos como el mentol, el aloe vera, el árnica o el harpagofito que aligeran las piernas.
Además, puedes incluir en tu alimentación algún complemento diurético que contenga castaño de indias, centella asiática, vid roja o rusco, por ejemplo, cuyas propiedades drenantes han sido comprobadas.
Con todo, debes evitar vestir prendas muy apretadas porque éstas dificultan la circulación sanguínea y, por tanto, provocan la sensación de piernas cansadas. En la medida de lo posible, usa prendas sueltas o menos ceñidas. ¡Tus piernas lo agradecerán!
Si sufres sobrepeso, obesidad, hipertensión o diabetes, es muy probable que padezcas el síntoma de piernas cansadas, por lo que debes consultar a un especialista para que te recomiende la dieta y/o tratamiento a desarrollar.
Y, como no podemos acabar un post sobre piernas cansadas sin hablar de embarazo, hemos de decir que si estás embarazada, puedes seguir todos estos consejos pero debes prestar atención a los cosméticos y utilizar los compatibles a tu estado -que contengan sólo ingredientes naturales-.
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