¿Qué es la rinitis alérgica?
¿Sabes qué es la rinitis alérgica? Es la inflamación de la mucosa nasal. Sus síntomas son similares a los de un resfriado, puesto que cursan con congestión nasal, mucosidad, estornudos y picor en la nariz.
A pesar de que no revistan gravedad, sostenidos en el tiempo provocan un profundo malestar. De hecho, existen numerosos estudios que afirman que la rinitis tiene mayor impacto que el asma bronquial en la vida de quien lo padece.
Síntomas de la rinitis alérgica
Estornudos frecuentes, taponamiento nasal, picor de ojos y nariz y una importante secreción nasal acuosa son los síntomas que caracterizan a la rinitis alérgica. Se producen habitualmente en dos épocas concretas del año: otoño y primavera. Por otro lado, no suelen acompañarse de malestar general ni fiebre.
Una característica singular de la rinitis alérgica es un comienzo brusco que remite al evitar el contacto con el alérgeno o al tomar antihistamínicos.
¿Qué causa esta inflamación?
En un alto porcentaje de personas, la rinitis surge como consecuencia de la inhalación de ciertas sustancias. Las más habituales son hongos, pieles de animales, polen, ácaros del polvo y ciertas sustancias que pueden utilizarse en el trabajo.
Por otro lado, puede ser continua o estacional. La segunda suele originarse por el polen y su grado de afectación depende de su concentración. Normalmente suele desarrollarse en la infancia.
Sin embargo, existe un pequeño porcentaje de personas que padecen rinitis en su edad adulta. Estas tienen los mismos síntomas aunque no se pueda demostrar sensibilidad a ningún alérgeno, por tanto, se desconoce la causa que lo produce.
Remedios naturales para tratar la rinitis alérgica
Si el invierno es muy caluroso, se adelanta la polinización de arizónicas y cipreses. Esto hace que los síntomas de la rinitis alérgica también se adelanten. Veamos algunos consejos para combatirla:
1. Jengibre
Es un antihistamínico natural con propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y antivíricas. También es un potente inmunomodulador que ayuda a aliviar la sintomatología habitual, como la secreción nasal o la congestión.
Ralla una cucharada de jengibre y pon un trozo de canela en una taza de agua. Llévalo a ebullición durante 5 minutos, cuélalo y añade zumo de limón y miel. Bebe esta infusión un par de veces diarias durante la temporada de alergia.
2. Vinagre de manzana
Es un remedio muy efectivo para la rinitis alérgica debido a sus propiedades como antihistamínico y antibiótico. Colabora en la reducción de la intensidad de la sintomatología y desarrolla un papel fundamental en la regulación del sistema inmunitario.
Añade a un vaso de agua tibia un par de cucharadas de vinagre de manzana orgánico sin filtrar. Incorpora una cucharada de miel y zumo de limón. Bebe este preparado 3 veces diarias durante la temporada de alergias.
3. Vapor
Al inhalar vapor consigues eliminar el exceso de mucosidad de las fosas nasales, así como cualquier irritación. Gracias a esto, desaparecerán los síntomas asociados a la rinitis alérgica (dolor de garganta, secreción nasal o estornudos).
Vierte agua en un bol grande y añade unas gotitas (3 o 4) de árbol del té, romero, menta o eucalipto. Tápate la cabeza con una toalla e inclínate sobre el bol para respirar. Inhala profundamente el vapor durante 5 o 10 minutos y, posteriormente, suénate la nariz.
Repite este proceso varias veces al día. En el caso de los pequeños de la casa, un baño caliente será un gran alivio, ya que no pueden inhalar vapor.
4. Agua salina
Los lavados nasales con solución salina son también muy útiles, puesto que mejoran considerablemente los síntomas de la rinitis alérgica.
Tras comprar una solución, tienes que hacerla fluir hacia atrás y soplar suavemente por la nariz para eliminar el exceso de solución y de moco. Puedes repetir este proceso dos veces al día acorde a las instrucciones del laboratorio fabricante hasta que aprecies mejoría.
5. Ajo
El ajo es un antihistamínico natural y, además, tiene otras propiedades que ayudan al sistema inmunitario. De ahí su eficacia para combatir la rinitis alérgica. ¿Cómo utilizarlo? Mastica a diario dos o tres dientes de ajo crudos. Asimismo, recuerda incluir el ajo (en polvo o crudo) en tus comidas.
Si tienes antecedentes alérgicos, también te puedes beneficiar de las propiedades del ajo consumiendo un suplemento de ajo diario en la temporada de alergias.
6. Probióticos
En 2013 se demostró que el Lactobacillus acidophilus es un probiótico perfecto para minimizar la severidad y frecuencia de los síntomas de la rinitis alérgica. Recuerda seguir las instrucciones de los laboratorios a la hora de consumirlo o consultar con nosotros en la sección de comentarios.
7. Vitamina C
La vitamina C colabora en la estimulación del sistema inmunológico, por tanto, puede ayudar a prevenir y acortar la duración de una enfermedad.
Puedes consumir esta vitamina en tomates, coles de Bruselas, fresas, pimientos, naranjas, limones, brócoli, kiwi… Pero, si lo deseas, también puedes utilizar suplementos de vitamina C.
¿Cómo saber si sufro rinitis alérgica crónica?
Para poder determinar y diagnosticar con certeza tu caso, debes acudir a un profesional. El médico puede realizar un examen físico acompañado de estas pruebas:
- Analítica sanguínea. De este modo, se comprueba la respuesta de tu sistema inmunitario a un alérgeno concreto.
- Prueba del pinchazo. Se coloca el alérgeno en la parte superior de la espalda o el brazo y se hace que penetre en la piel. Si aparecen ronchas o una inflamación, querrá decir que tienes alergia a esa sustancia y es la que te provoca la rinitis.
Ahora que tienes más conocimiento sobre qué es la rinitis alérgica, ya sabes que lo más efectivo es limitar la exposición a sustancias que lo provocan. Sigue conectado con Mifarma by Atida Plus para más información y consejos de salud.