Proteínas

Las proteínas son moléculas complejas y de gran tamaño con una gran cantidad de funciones. Esto es lo que permite agruparlas en distintos tipos y es la razón por la que se encuentran en todas las células del organismo.

Además, forman parte esencial de la dieta, en la que se clasifican como macronutrientes. Las necesitamos en cantidades apreciables y puedes aprovecharlas de fuentes muy diversas.

¿Qué son?

Son moléculas que constituyen el fundamento de nuestra anatomía y fisiología. Están formadas por miles de unidades llamadas aminoácidos, de los cuales existen 20 diferentes. En general, se obtienen de la dieta, aunque muchos pueden ser sintetizados dentro del organismo a partir de moléculas diferentes.

Los aminoácidos forman cadenas y su secuencia establece las funciones de las proteínas, que están determinadas genéticamente. Una o varias cadenas se unen para formar la molécula definitiva, que es tridimensional. Su forma puede ser fibrosa o globular, es muy específica y determina sus acciones. Cada día se producen miles, que son codificadas por 20 000 genes.

Estas moléculas pueden unirse entre sí o con otras de distinta naturaleza. En el primer caso, se trata de proteínas estructurales, como el colágeno. Cuando se enlazan con otras sustancias, este nexo es selectivo y define su función.

Por ejemplo, la hemoglobina se une al oxígeno para transportarlo, las enzimas se agregan al sustrato para acelerar las reacciones químicas y las hormonas se fijan en receptores específicos de las membranas celulares para generar cambios internos.

Funciones de las proteínas en el cuerpo: por qué las necesitamos

Prácticamente ningún proceso orgánico es ajeno a la presencia de estas sustancias. Atida | Mifarma es un destino para el bienestar y, por eso, a continuación veremos los principales tipos de moléculas proteicas según sus funciones.

• Anticuerpos o inmunoglobulinas, que se unen a partículas, virus o bacterias identificadas como extrañas al organismo.
• Enzimas, las más especializadas, que catalizan las reacciones químicas del metabolismo. Además, tienen la función de decodificar la información genética para fabricar nuevas proteínas.
• Mensajeras, que coordinan distintos procesos biológicos.
• Las estructurales, como el colágeno y la elastina, son las encargadas de proporcionar soporte a los tejidos.
• Algunas funcionan como reserva energética: entre ellas destacan la albúmina de la clara de huevo y la lactoalbúmina de la leche.
• Las de transporte y almacenamiento constituyen un reservorio de sustancias, además de servir para distribuirlas.
• Otras forman parte de la estructura celular, como las glicoproteínas de las membranas.
• Las histonas intervienen en los mecanismos de expresión genética. Otras sustancias proteicas intervienen en la división celular.
• Mantienen la homeostasis, o equilibrio interno, la ósmosis y el pH.
• Coagulación: el fibrinógeno y la trombina contribuyen a formar los coágulos sanguíneos.
• Las mucinas son segregadas por las mucosas para lubricarlas y protegerlas de los gérmenes.
• Son el fundamento de la contractura muscular, gracias a la miosina y la actina. La dineína tiene relación con la movilidad de los cilios, por ejemplo, los de las células que tapizan los bronquios.

Beneficios que aportan

Estas moléculas son un elemento fundamental en la dieta, y su ausencia o déficit produce desnutrición, que se manifiesta en dos formas proteinoenergéticas, el kwashiorkor y el marasmo. Son enfermedades particularmente graves en los niños. 

Construyen masa muscular

Un consumo adecuado, tanto en cantidad como en calidad, genera y mantiene la masa muscular. Esto es particularmente importante en las etapas de crecimiento, para los deportistas y en las personas mayores. En el artículo sobre <em> aporte nutricional de proteínas a partir de los 50 años</em> hay información de gran interés.

Función a nivel celular

Son imprescindibles en casi todos los procesos intracelulares y tienen funciones estructurales, metabólicas, de mensajería, reparadoras de los tejidos y defensivas.

Control de peso

Se ha demostrado que una dieta con alto contenido en proteínas produce una sensación de saciedad que lleva a consumir los alimentos en menor cantidad. Esto sucede siempre y cuando el consumo de grasas sea bajo. El post  aprende a controlar tu paso y a detoxificar el organismo guarda relación con esta función.

Rendimiento físico

Las de naturaleza albuminoide son claves para reparar los tejidos después de una intensa actividad. Además, son reservas de energía que proporcionan vigor.

¿Qué tipos de proteínas existen?

Estas sustancias pueden ser de origen vegetal o animal. La diferente procedencia es más importante de lo que parece a primera vista, ya que también determina su composición.

Proteínas vegetales

Las que obtenemos de las plantas son de naturaleza muy diversa, ya que podemos consumir una gran variedad de especies vegetales. Tienen el inconveniente de que, con excepciones, son de menor calidad y se encuentran en una proporción menor. La mejor manera de aprovechar las proteínas de los vegetales es combinarlas en las comidas, por ejemplo, al tomar legumbres y cereales integrales al mismo tiempo.

Proteínas animales

Los tejidos de origen animal proporcionan un elevado contenido de proteínas de alta calidad. Tienen el problema de que en muchos casos van acompañadas de una cantidad elevada de grasas.

Las proteínas de origen microbiano son sintetizadas por algas, levaduras o bacterias. Todavía es pronto para asegurar que serán útiles, pero la meta es producirlas de una forma más barata, con un buen valor nutricional y en grandes cantidades.

Proteínas de alto y bajo valor biológico

El valor biológico o BV expresa la magnitud de la absorción de una proteína que procede de la dieta. Es un término que expresa la calidad, de la que hablamos anteriormente, y bajo esta calificación tenemos proteínas de alto valor biológico, de buena calidad o completas, en contraposición a las de bajo VN, de poca calidad o incompletas.

El término completo o incompleto hace referencia a la composición de las proteínas. Las completas contienen todos los aminoácidos esenciales, que son 9: valina, leucina, histidina, isoleucina, fenilalanina, treonina, triptófano, lisina y metionina.

La manera de determinar este valor es mediante el nitrógeno retenido en el organismo. Las sustancias proteicas son la principal fuente de este elemento, que se mantiene estable en el organismo gracias a un equilibrio entre lo que se absorbe y lo que se excreta. El VB de los alimentos que proporcionan proteínas a la dieta va del 0 al 100. A continuación, colocamos algunos ejemplos.

• Huevo entero, 100.
• Suero de leche, 100.
• Leche de vaca, 91.
• Carne de vacuno, 90.
• Clara de huevo, 88.
• Pescados, 85.
• Pollo o pavo, 79.
• Caseína (proteína de la leche), 77.
• Proteína de guisante, 75.
• Habas de soja, 75..
• Gluten de trigo, 65.
• Arroz integral, 59.
• Legumbres, 50.

Como vemos, las proteínas de origen animal son las de mayor valor biológico. En los cereales hay un déficit de lisina, mientras las legumbres y los frutos secos en su mayoría carecen de metionina.

Alimentos con proteínas que debemos añadir a la dieta

La ingesta recomendada es de 0,8 a 1 gramo por kilo y por día. Es decir, si pesas 60 kilos, deberás consumir 60 gramos diarios de este macronutriente, preferiblemente con los alimentos que te proporcionen las de alto valor biológico. Esto debe ser equivalente al 15 % de las calorías totales de la dieta, teniendo en cuenta que un gramo de proteínas aporta 4 calorías.

Como se observa en la lista de alimentos con alto valor biológico, los más recomendables desde este punto de vista son los huevos, los pescados, la carne de vacuno y la soja. Sin embargo, para las personas que no consumen estos alimentos existen otras opciones. Las combinaciones de alimentos vegetales pueden compensar la ausencia de determinados aminoácidos para conseguir un aporte completo y aumentar el VB.

Podemos disfrutar de una experiencia nueva para la salud y bienestar al preparar frutos secos y legumbres en una ensalada de cacahuetes y garbanzos. Otra combinación de alimentos con proteínas es la de frutos secos, legumbres o cereales integrales con soja, como almendras, lentejas o trigo con tofu. También eleva el BV la mezcla de semillas y frutos secos con cereales integrales, como vemos en el arroz salvaje con pasas y nueces.

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En el canal Youtube, el blog y las redes sociales de Atida | Mifarma está disponible una amplia información sobre los temas de salud que pueden interesar a todos. Hay que tener siempre presente que la salud y el bienestar son la mejor herramienta para mantener la belleza y que una alimentación rica en proteínas es un aspecto esencial.