Hernia Inguinal
¿Qué es la hernia inguinal?
La hernia inguinal es la frecuente de todas y se localiza en la región de la ingle, siendo más frecuentes en hombres y puede desarrollarse hasta bajar al escroto.
El primer síntoma que puede aparecer es un bulto. Otras veces, el síntoma inicial es el dolor, que avisa de la existencia de la hernia en la exploración llevada a cabo en la consulta.
Si la hernia se presenta de manera aguda con estrangulación, en este caso se deben intervenir inmediatamente.
Causas
Pueden aparecer por defectos de origen congénito o por defectos adquiridos.
En primero de los casos, suelen ser la causa de las hernias en la infancia, por persistencia de un conducto llamado peritoneo-vaginal, que no llega a formar correctamente la pared muscular al final del desarrollo fetal.
En el segundo de los casos podríamos incluir el aumento de la presión abdominal de manera más o menos brusca, por ejemplo, ante un esfuerzo importante; y la debilidad constitucional de la pared abdominal en la zona llamada triángulo de Hesselbach.
¿Qué especialista trata la hernia inguinal?
Para la detección de pequeñas hernias, la ecografía y la TAC son útiles.
En algunos casos, la hernias hinguinales alcanzan un gran tamaño, siendo aparentes a simple vista.
El tratamiento es quirúrgico en prácticamente todos los casos, pero será el especialista Digestivo o el especialista en cirugía General quien tome la decisión de com se debe actuar en cada caso.
Hay dos procedimientos de curarla:
Por un lado la cirugía abierta y por otro la técnica de la laparoscopia.
En la primera, realizada con anestesia local, general o sedación, el cirujano realiza una incisión en la ingle y empuja el tejido que sobresale al interior del abdomen.
Luego, cose el área debilitada y con frecuencia la refuerza con una malla sintética (hernioplastia).
La abertura se cierra después con puntos, grapas o adhesivo quirúrgico.
La segunda de las técnicas es mínimamente invasiva, requiere anestesia general y el cirujano opera a través de varias incisiones pequeñas en el abdomen, usando gas para inflarlo y hacer que sea más fácil ver los órganos internos.
Mediante un tubo pequeño equipado con una cámara diminuta (laparoscopio) se insertan, guiado por la cámara, los pequeños instrumentos a través de las otras incisiones reparando con una malla artificial.