Alopecia androgenética en mujeres: qué es, causas y tratamientos
La alopecia androgenética es la calvicie más común. Se da cuando se produce la caída excesiva de cabello con un patrón determinado. Puede darse también en hombres, pero afecta al 25 % de las mujeres a lo largo de su vida.
Qué es la alopecia androgenética femenina
La raíz del pelo se aloja en el folículo piloso y es la encargada de absorber los nutrientes destinados al cabello. Pero ¿qué sucede cuando hay grasa que se deposita en la raíz o el folículo? Sencillo. Se impide esta absorción de nutrientes y aparece la caída del cabello asociada a la alopecia androgénica.
En este caso, al hablar de grasa no nos referimos a la característica del cabello graso. Por el contrario, hablamos de la grasa interna con un origen hormonal y, en ocasiones, genético.
Este tipo de pérdida de cabello es crónica y precisa de un tratamiento continuo. El paso del tiempo hace que el folículo piloso muera y, por tanto, finaliza el ciclo vital del cabello. Quienes lo padecen pueden notar como su pelo es cada vez más fino, hasta que desaparece por completo.
La alopecia androgenética femenina suele aparecer en la etapa de la menopausia, alrededor de los 45 años. En este momento se produce una bajada del nivel de estrógenos en el organismo. Aunque, como hemos apuntado, pueden darse casos con un origen genético, estos son minoritarios.
La pérdida de cabello suele concentrarse en la zona superior de la cabeza. A diferencia de los hombres, no es habitual llegar a la calvicie. En cambio, la pérdida puede representar hasta el 80 % del pelo.
Síntomas
El síntoma principal es la caída de cabello. En el caso de los hombres, suele apreciarse en la coronilla y en la frente. Sin embargo, en el caso de las mujeres donde resulta más notorio es en la región parietal.
La densidad es cada vez menor en las zonas parietales, aunque suele respetarse la línea de nacimiento frontal. ¿De qué manera puedes notar que te está pasando esto? Cuando la «raya» que divide en dos el cabello cada vez se ensancha más.
Causas de la alopecia androgenética en mujeres
La alopecia androgénica femenina es multifactorial. Se suele producir por un aumento de los andrógenos que circulan en la sangre. Estos provocan una reducción del tamaño de los folículos y, como consecuencia, el cabello es cada vez más fino. Hasta tal punto, que puede parecer solo vello si no se trata adecuadamente.
Es posible que tengas antecedentes familiares directos, pero no tenerlos no descarta que puedas padecer este tipo de alopecia.
Si puedes apreciar estos síntomas antes de la menopausia, se denomina alopecia precoz. En este caso, una vez llegues a la menopausia, la disminución de los estrógenos hará más evidente este problema.
Otras de las causas que pueden provocar alopecia en la mujer son ciertas enfermedades concomitantes, regímenes hipocalóricos, trastornos hormonales o déficits de hierro y vitaminas.
Tratamientos para combatir la alopecia femenina
En la actualidad no existe un tratamiento para frenar la alopecia androgénica. Sin embargo, sí que pueden combinarse diferentes terapias a largo plazo para evitar su progresión. No necesitarás realizar los tratamientos durante toda tu vida, aunque cuanto más tiempo los prolongues mejor resultado obtendrás.
Por regla general, es habitual comenzar con un tratamiento intensivo. A partir de ahí, la intensidad y frecuencia de estos se reducirá con el objetivo de que sean más cómodos y sostenibles en el tiempo.
Gracias a la diversidad de soluciones disponibles hoy en día, podrás ajustar el tratamiento a tus necesidades personales.
¿Cómo apreciarás los resultados? Comprobarás cómo aumenta tu densidad capilar y cómo se engrosa el cabello.
Los tratamientos más habituales para la alopecia androgenética son:
1. Medicamentos específicos
Existen fármacos antiandrógenos que actúan selectivamente sobre la raíz folicular para frenar y revertir la alopecia. Es el caso de los inhibidores de la 5 alfa reductasa (finasteride y dutasteride).
La administración de este tratamiento puede ser oral, tópica (finasteride) o en forma de microinyecciones. Durante el mismo, puedes llevar una vida normal, aunque debes evitar donar sangre. Esto último debes mantenerlo durante los 6 meses posteriores.
El dutasteride ha demostrado una mayor eficacia en casos de alopecias con predominio frontal o alopecias difusas. Las microinyecciones de este fármaco son un tratamiento muy actual que consiste en su infiltración en el cuero cabelludo. De este modo, en la raíz del folículo se concentra una gran cantidad de medicamento.
Su efecto suele prolongarse en el tiempo, por lo que solo necesitarás entre 2 y 4 sesiones anuales para mejorar tu densidad capilar.
Este procedimiento puede ser el complemento idóneo a un tratamiento antiandrogénico oral, pero también se utiliza como terapia única.
2. Minoxidil en diferentes presentaciones
Es uno de los tratamientos tradicionales para combatir la calvicie. Puedes utilizarlo vía oral o tópica.
- Minoxidil oral. El tratamiento oral de minoxidil es muy efectivo en mujeres con alopecia androgénica. Las dosis que se utilizan son muy bajas (entre 0,25 y 2,5 miligramos diarios) y efectivas. De hecho, pueden evitar el uso del minoxidil tópico.
- Minoxidil tópico. Es un tratamiento en forma de espuma o líquido que se aplica sobre la piel del cuero cabelludo. Como es un producto que incorpora alcohol entre sus ingredientes, puedes notar una ligera irritación cutánea al comienzo del tratamiento. No hay que aplicar más de 2 mililitros diarios y puedes combinarlo con la forma oral del medicamento.
3. Plasma Rico en Plaquetas
Esta terapia consiste en la centrifugación de tu sangre, previamente extraída como para una analítica. Posteriormente, se aísla la fase rica en factores de crecimiento que se derivan de las plaquetas. Por último, se infiltra esta solución en tu cuero cabelludo.
4. Otras terapias
Otros tratamientos que han mostrado eficacia en casos de alopecia androgénica son el microneedling o el láser de baja potencia.
Lo cierto es que, además de esto, hay muchas investigaciones todavía en desarrollo. Estas indican que, en un futuro no muy lejano, habrá disponibles terapias de medicina regenerativa, con células madre.
5. Trasplante capilar
Es una opción que no se puede descartar, pero para ello has de cumplir una serie de requisitos. Por ejemplo, la calidad de tu cabello ha de ser buena, la zona con alopecia no debe ser muy grande… Esto es algo que debe valorar un especialista.
Por último, siempre puedes complementar todo lo anterior con diferentes soluciones y champús anticaída adaptados a tus necesidades.
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