Cómo eliminar el mal aliento
Tener mal aliento o halitosis es un trastorno que afecta a numerosas personas, y que se convierte en un verdadero problema para quienes lo padecen a la hora de relacionarse con otras personas.
Este desagradable olor se relaciona sobre todo con problemas de la cavidad bucal. Por lo tanto, las claves sobre cómo eliminar el mal aliento están relacionadas con una buena higiene oral.
Tabla de Contenidos
¿Qué es la halitosis?
La halitosis se define como un conjunto de olores desagradables que aparecen en la boca, y que pueden deberse a diversas patologías orales o una higiene deficiente de la cavidad bucal.
De todos modos, hay que tener en cuenta que en algunos casos concretos puede ser un síntoma de trastornos respiratorios, digestivos, hepáticos o renales. Es lo que se denomina como halitosis extra oral. Por lo tanto, si el problema persiste es necesario acudir al médico para hacer una revisión médica.
La halitosis oral
Se trata del mal aliento que proviene de la cavidad oral, y que se debe sobre todo a la acumulación de placa bacteriana en la lengua.
Las enfermedades periodontales y la caries son otras causas habituales de halitosis, al igual que el tabaquismo.
Asimismo, hay que tener en cuenta que la saliva cambia con el paso de los años. Es habitual que los ancianos tengan problemas de aliento, que pueden verse agravados con el uso de prótesis dentales.
Algunos fármacos, las dietas hipocalóricas o alimentos como la cebolla o el ajo son causa de mal aliento.
Cómo eliminar el mal aliento
El cuidado de la higiene dental es indispensable para eliminar el mal aliento. Esto incluye cepillar los dientes después de cada comida con un dentífrico adecuado para cada tipo de dentadura. Si padecemos de xerostomía o boca seca, es importante que optemos por un producto específico para mejorar la calidad de la saliva, y reducir la halitosis.
El uso de hilo dental para eliminar restos de comida entre los dientes y de enjuague bucal es indispensable. Hay que conseguir una limpieza efectiva de toda la cavidad bucal, especialmente donde no alcanza el cepillo, incluyendo mejillas y paladar.
Estimular la producción de saliva es también una buena opción para acabar con el mal olor de la boca. La presencia de cítricos, verduras y alimentos ricos en fibra en una dieta sana es esencial para conseguirlo.
Masticar bien los alimentos, beber agua con frecuencia y respirar por la nariz ayuda a que la boca no se seque. Así mantendremos la saliva en la cantidad y buen estado adecuados para evitar el mal aliento.
Por supuesto, las revisiones periódicas en la consulta del dentista son esenciales para asegurar una buena salud dental. Un factor indispensable para prevenir la aparición de mal aliento.
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